sábado, 30 de septiembre de 2017

LA VIOLENCIA. DE GÉNERO. LA DE AMBOS SEXOS.

                Como ya exponía en los artículos de Mayo y Junio de 2016, la Ley de Violencia de Género es protectora de las Mujeres, y por ello, mayor acierto ha tenido la denominación de los Juzgados competentes para su aplicación, Juzgados de Violencia sobre la Mujer.

                Ahora bien, bien pensado, al ser utilizada la ley por sus propias protegidas, no como protectora defensa sino como arma arrojadiza, de destrucción personal y familiar, es una Ley de Violencia, de Género, en toda regla; gracias a la cual, se empieza una guerra...
...A sabiendas ganada. Sin mayor gloria, sino con vergüenza.
Y ése es el problema.

                Vergüenza debería darles a las que denuncian falsamente, frente a las que no les queda más remedio, por verdadera necesidad de proteger su integridad, y dignidad. 
                       (Dignidad que en ningún caso se pierde por actos ajenos sino propios.)

Quienes la pierden libremente por, supuestamente, proteger;
lo que, verdaderamente, no tienen.

                Iguales son las que denuncian y el mismo día que sale del Juzgado el supuesto maltratador, y a sabiendas de la orden de protección, que sobre él pesa, con riesgo de incurrir en delito de quebrantamiento, con posible consecuente ingreso en prisión, quieren, el mismo día, volver. Y vuelven, a los pocos días, a denunciar.

Y es que..., me remito a lo escrito en aquellos referidos artículos,  que retomo y continuaré.
Ya que... yo también, guardia tras guardia...
Termino más caldeada.
Y es por ello que, con todos mis respetos,
pero como a perros con rabia... les echaría...
AGUA.
Agüita. Fría!
En Abundancia.
(Y como los juicios penales son públicos! Hasta a mi hermano llevé. 
Una vez, para que en vivo y en directo, "se lo gozara".)


No hay comentarios:

Publicar un comentario